Carlos Páez

Carlos “Carlitos” Páez Rodríguez es un empresario, publicista y orador uruguayo, reconocido a nivel mundial por ser uno de los 16 sobrevivientes de la tragedia aérea de los Andes en 1972. Su vida es un testimonio de la capacidad humana para la supervivencia, la resiliencia y el poder del trabajo en equipo. Hijo del famoso artista Carlos Páez Vilaró, la historia de “Carlitos” no solo se define por el accidente, sino por la forma en que ha utilizado esa experiencia para inspirar a millones de personas a lo largo de su vida.

Cuando el avión que transportaba a un equipo de rugby uruguayo se estrelló en la Cordillera de los Andes, Páez tenía solo 18 años y era el pasajero más joven de la aeronave. Durante los 72 días que permanecieron varados en condiciones extremas, demostró una madurez y una fortaleza sorprendentes. Tras ser rescatado, su historia se convirtió en un símbolo de esperanza. Páez ha relatado en numerosas ocasiones cómo la experiencia en la montaña lo transformó, pasando de ser un joven “malcriado y consentido” a una persona consciente del valor de la vida y la humildad.

Más allá de la supervivencia, Páez se ha dedicado a compartir su testimonio en conferencias motivacionales por todo el mundo. Utiliza su experiencia en la Cordillera para hablar sobre liderazgo, trabajo en equipo, manejo de la adversidad y la importancia de la actitud frente a los desafíos. Sus charlas son conocidas por su sinceridad y su mensaje de que, aunque no podemos controlar las circunstancias, sí podemos elegir la forma en que las enfrentamos. Su libro Después del día diez se ha convertido en una guía fundamental para el desarrollo personal.

Recientemente, su historia ha vuelto a captar la atención mundial con el estreno de la película La sociedad de la nieve, donde él mismo interpreta a su padre, Carlos Páez Vilaró. Esta participación ha permitido que una nueva generación conozca de cerca los valores de superación y solidaridad que surgieron de la tragedia. La vida de Carlos Páez es un recordatorio de que las mayores lecciones de la vida a menudo se encuentran en los momentos de mayor dificultad, y que la experiencia más dura puede ser la fuente de un poderoso mensaje de esperanza.